Del puente a la sentina


Capítulo 41

El Minotauro al fondo del laberinto


El asunto de la que se llama a sí misma princesa es muy complicado, créame, señoría. Me cuesta mucho tocar ese tema porque mi desgracia empezó a raíz de que yo hablara con ella. Los espías le andaban detrás desde que se negó a devolver los cien millones de dólares que le reclamaban. Ella sostiene que le apretaron las tuercas a base de bien. Con amenazas, seguimientos y hasta presiones sobre los bancos con los que ella trabajaba. Y cuando se enteraron de que habíamos hablado y que me había proporcionado información, la tomaron conmigo. Ahí fue cuando el periodista Aguirre empezó a publicar cosas sobre mí. Nada de lo que publicó tenía fundamento. La prueba fue que desde el Ministerio abrieron una investigación y la cerraron después con todos los pronunciamientos a mi favor. Eso sí, ya me advirtieron entonces mis jefes: "cuídate de los envidiosos". Y tenían razón. En el Ministerio llegaron a la conclusión de que mis actividades eran compatibles con mi condición de policía en activo, pero las envidias empezaron a hacer mella y acabé en la cárcel. Y, como le digo a usted, todo fue a raíz de mis conversaciones con esa señora. Ya digo que lo suyo es muy complicado.

Pues la complicación está por todas partes, señoría. Para empezar, llegó a tener más de 20 sociedades pantalla offshore para ocultar sus tejemanejes. Yo enseñé las grabaciones que tenía después de haber hablado con ella largo y tendido y todo el mundo miraba para otro lado. Un fiscal, cuyo nombre no quiero dar, me dijo que ahí había secretos de Estado y que nadie iba a ser capaz de tirar del hilo. Claro, se trataba nada menos que de una examante del emérito. También lo puse en conocimiento de un alto cargo del partido en el Gobierno. dos años antes de que saliera a la luz pública. La madeja estaba muy enmarañada, desde luego, en parte porque la señora lo había querido y en parte porque por el otro lado el hilo llevaba directamente al Minotauro, y todo el mundo tenía miedo de enfrentarse al monstruo. Ahora parece que se ha levantado un poco la veda, sobre todo a raíz de que el caso saltase a nivel internacional, porque aquí no quieren que haya tribunales extranjeros que nos dejen en evidencia, claro está. Pero creo que no me equivoco yo si le digo que al final se va a echar tierra encima y no habrá nada. Ya veremos.

Publicado el 11 de agosto de 2022.


Volver a página anterior