Del puente a la sentina


Capítulo 38

Un corrido mexicano


Que no le vengan con milongas, señoría. Ahora resulta que los responsables de mi contratación eran los jefes de seguridad de las empresas afectadas y que los dos jefazos ni se habían enterado. Pero si Sinesio y Vallés estaban cagados con la operación, señoría. Si ni se fiaban de sus propios ejecutivos y hasta temían que hubiera fugas internas de información. Y, efectivamente, detectamos que uno de los hombres de confianza de Sinesio tenía tratos con los mexicanos que apoyaban la operación de asalto al poder de Albareda. Probablemente el tipo estaría llevando un doble juego con su patrón y los otros.

Que la cosa no era ninguna tontería lo prueba el hecho de que me mandaran investigar si había compañías rusas o chinas ocultas detrás de la empresa de Albareda o de sus asociados mexicanos. Y eso no es que lo diga yo, es que eso lo han dicho los dos compañeros que estaban al frente de la seguridad de las empresas de Sinesio y de Vallés.

También dicen que me contrataron para evitar que lo hiciera Albareda. ¿Y de dónde sacaban que Albareda estaba interesado en contratarme? ¿Por qué suponían que la parte contraria quería contratar mis servicios? Supongo que les habían llegado noticias de mis resultados. Además, yo ya tenía mucha información de Albareda de tiempo atrás, de cuando me contrató Garzo por lo del banco. Solo había que actualizar toda esa información. Ellos querían saber si tenía patrimonio suficiente como para ser una amenaza. De sobra sabían que sin la ayuda del grupo extranjero Albareda no tenía nada que hacer. Es cierto que tenía dinero negro en paraísos fiscales, era un comisionista reincidente, pero él solo no tenía mucha capacidad de maniobra. Su ambición siempre ha sido más grande que sus posibilidades. El único peligro que había era que la investigación de su patrimonio revelara pagos irregulares a políticos relevantes. Albareda era insistente, eso sí. A pesar del fracaso estrepitoso con Garzo, volvía a la carga. Y, de nuevo, con el conspirador Luis Diéguez tejiendo viscosas telarañas en la sombra.

La investigación ya le digo que no fue nada fácil, teniendo además en cuenta que, al ser una operación de esta envergadura en un sector estratégico, tanto el CNI como los servicios secretos de México forzosamente tenían que estar sobrevolándola y había que tener cuidado para que no consiguieran datos de mis investigaciones.

Publicado el 8 de agosto de 2022.


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