Quién sabe si ese material que tenía Troncoso está todavía oculto o si nunca existió. Hasta donde yo sé, lo que el Radfahrer les entregó a los policías no era nada importante y parece que ya estaba todo ello en manos del juez que por entonces llevaba el caso. Así que tanto ruido para nada. Y se han metido en el fango hasta el corvejón, incluido el ministro, por parte del Gobierno, y hasta las más altas instancias del partido. No, señoría, tal altas no. El jefe supremo nunca se moja. Los señores X siguen y seguirán siendo para siempre la incógnita de la ecuación que nunca se resuelve, señoría. El mismo Troncoso afirma que mandó destruir una grabación que podía comprometer al Señor X como muestra de buena voluntad. Además, por lo que yo he podido saber, se han suprimido algunos pasajes del informe policial que, este sí, fue entregado al juez. Troncoso, por su parte, asegura que tenía esa grabación en la nube y que le dio instrucciones a un preso de su confianza que salía de permiso para que la destruyera. Creo que también dijo que había una copia de esa grabación en un pincho que guardaba en un jarrón de su casa y que, cuando salió de permiso por primera vez, vio que no estaba donde lo había dejado. No, yo no sé si el Ciclista fue el que lo cogió, si es que fuera cierto lo que dice Troncoso de su existencia y desaparición. Yo ya no tuve nada que ver con los trabajos del chófer. Yo, como le digo, me limité a captarlo y ponerlo en contacto con la persona que me había hecho el encargo. Sí, esa persona era mi jefe inmediato, el comisario Sánchez Ayuso.
No, yo no sé prácticamente nada del inspector Javier Maiz. Él llevaba la investigación del caso por el que empezaron a poner la lupa sobre Troncoso, eso sí lo sé. Maiz acusa a dirigentes policiales a los que yo conozco de ponerle todo tipo de dificultades para llevar su investigación. Lo obligaron a borrar parte de sus informes además de tratar de apartarlo del caso. Creo que incluso le ofrecieron un puesto muy bien remunerado en una delegación diplomática en el extranjero donde se gana buena pasta, eso que nosotros llamamos "un colacao", y que lo rechazó. Muy íntegro parece el tal inspector Maiz. ¡Como para fiarse a estas alturas de los que van de puros!
Publicado el 1 de agosto de 2022.
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